Cómo envasar la cerveza en botella o barril. Una de las cuestiones principales a las que se enfrentan las personas que se inician en la fabricación de cerveza es su envasado. En este artículo presentaremos las ventajas e inconvenientes de los sistemas más utilizados: botella y barril.
Inicialmente, debido a que resulta más sencillo, el envasado de la cerveza se hace en botellas de cristal, ya que permiten su conservación, manipulación, etiquetado y distribución.
Para su correcta dispensación, la cerveza requiere estar a una determinada temperatura. Ello implica la necesidad de disponer de un refrigerador que nos permita tener las botellas refrigeradas con suficiente antelación.
Pero el problema surge cuando el volumen de cerveza a envasar es elevado. En estos casos necesitamos un mayor espacio para poder tener guardadas todas las botellas refrigeradas.
Para solucionar este inconveniente tenemos el barril. El barril nos permite dispensar mayores volúmenes de cerveza, ocupando un menor espacio y manteniendo la calidad de ésta una vez servida.
Sin embargo, la utilización del barril genera una serie de inconvenientes:
- La necesidad de que el bar disponga de una instalación adecuada.
- La necesidad de disponer de un sistema de envasado de cerveza en barril.
- Problemas con la generación de espuma en la dispensación.
- Debemos tener un mayor control del volumen de CO² durante el proceso de embotellado.
- Controlar la generación de CO² si existe una segunda fermentación en el barril.
Frente a ello, el barril nos ofrece también una serie de ventajas importantes:
- La cerveza no recibe el impacto de la luz.
- La temperatura de la cerveza siempre es la misma.
- Permite dispensar más volumen.
- Ocupa menos espacio.
- El coste de transporte y manipulación es menor.
¿Cuál ha sido vuestra experiencia con el envasado?
¿Qué sistema os ha resultado más interesante?